La importancia de involucrarnos en nuestro cuidado

En mis años dedicada al cuidado estético  y capilar del paciente oncológico he podido constatar los maravillosos resultados que se obtienen  cuando nos involucramos activamente en nuestro autocuidado.

Cuando tomamos parte activa, por ejemplo,  en la selección de nuestra dieta sentimos que desaparece nuestra apatía, que nuestro cuerpo comienza a responder más pronto y mejor al proceso de curación.Hoy por hoy aún existen efectos secundarios en nuestro aspecto exterior tras la aplicación de quimioterapia, pero si observamos unas sencillas reglas estos efectos se minimizan.

Comencemos por la piel:

Debemos protegernos con una crema solar adecuada, pero no debemos olvidar que no podemos exponernos directamente al sol en horas punta.La piel no debe ser expuesta a limpiezas abrasivas, por ejemplo peeling tanto facial como corporal.

Cuidado con las depilaciones en zonas irritadas. Una vez comenzado el tratamiento de quimioterapia si deseamos una depilación debemos consultar con el médico o profesional estético.Los tratamientos faciales deben ser oxigenantes o hidratantes; jamás usar ácidos glicólicos ni exfoliantes o blanqueantes.

La irritación cutánea puede aparecer en cualquier parte del cuerpo, hay que tener especial cuidado con las palmas de las manos y de los pies. La inmersión en agua fría ayuda mucho a calamar los síntomas.

             No debemos llevar ropa apretada y que nos dejen marcas. ¡Es muy importante!

Es muy común que la piel se seque, las cremas ricas en  aceite de rosa Mosqueta, o aceite de la Crisálida del Gusano de la Seda son muy recomendables.

Puede aparecer una hiperpigmentación en toda la piel en general o en las zonas donde se aplican los tratamientos, vendajes y en los pliegues de las manos  y pies o incluso en  los dientes, uñas y cabello. No debemos exponernos al sol y tampoco usar cremas despigmentantes. Este efecto secundario desaparecerá en unos meses, sólo hay que esperar.

Si perdemos las cejas en el transcurso del tratamiento no debemos realizar una micro pigmentación hasta acabados éste. Podemos usar cejas de sustitución o maquillaje semipermanente con plantillas.

Los maquillajes no deben ser grasos y los pintalabios deben estar libres completamente de plomo. Podemos limarnos las uñas con limas de cartón, jamás de metal y no podemos realizar una manicura con alicates. No debemos pintar las uñas ya que cuando hay que retirar la pintura con los disolventes éstos la dañan severamente.

Si la quimio tiene como efecto  la pérdida del cabello la caída comenzará sobre el día diecisiete después de la primera aplicación. Cuando comience a manifestarse debemos rasurar el cuero cabelludo y tratarlo con los productos adecuados para limpiar e hidratar, ya que la piel también está produciendo una eliminación de células.

Si decidimos usar una prótesis capilar debemos elegirla con el tiempo adecuado para que no nos produzca ansiedad o tengamos que conformarnos con algo que no nos gusta.

Durante todo el proceso de tratamiento de quimioterapia debemos mantener un cuero cabelludo cuidado para ayudarlo a regenerarse en perfectas condiciones.

No debemos llevar pañuelos muy ajustados ni pelucas que nos marquen la piel. Tenemos que buscar la comodidad y la belleza unida.

              Cuidar de nuestra salud y de nuestra imagen nos proporcionará una gran satisfacción y nos ayudará a sentirnos bien, a potenciar nuestra autoestima y por tanto a contribuir a la recuperación de nuestra fortaleza.

Un saludo. Marisa Caturla